Renault City k-ze, el kwid eléctrico

Los coches eléctricos para las masas son posibles… en China. En el Salón del Automóvil de Shanghai, Renault presenta el City K-ZE. Un coche urbano electrificado que se asemeja al Kwid, el modelo de bajo coste desarrollado para la India, señala el concesionario de coches de ocasión Madrid Crestanevada.

En su propia escala, China está avanzando rápidamente en la democratización del mercado de los coches eléctricos. En 2018 se vendieron 760.000 vehículos eléctricos. No es de extrañar que los fabricantes se apresuren a ofrecer sus servicios, sobre todo en el salón de Shanghai. En el acto, Renault presentó el City K-ZE según su concepto presentado en 2017. Una especie de SUV muy urbano con una distancia al suelo de 15 cm, protectores de puertas y pasos de rueda de plástico negro. Sus líneas se inspiran en gran medida en el Kwid, el coche de bajo coste nacido y comercializado en la India desde 2015. El aspecto interior inspira sencillez e incluso cierta simplicidad gracias a la pantalla táctil central de 8 pulgadas (que controla la navegación, la cámara de visión trasera e incluso una conexión 4G). Al acercarse a las rejillas de ventilación y a los tiradores de las puertas se nota que la calidad no es la principal baza del vehículo.

¿Potencia y autonomía del Renault City K-ZE?

Aunque podemos estimar que el estilo de este recién llegado podría encontrarse en las líneas de la próxima generación del ZOE, todavía hay muchas incógnitas sobre este vehículo. Especialmente técnico. Aquí y allá, podemos leer que el Renault eléctrico chino ofrecerá hasta 270 km de autonomía. Que la batería, de la que no sabemos de qué está hecha, ni su capacidad, pueda recargarse al 80% en 50 minutos. ¿Y su poder? Más tarde. El precio rondaría los 9.000 euros para un vehículo que será producido por eGT New Energy Automotive Co, la empresa conjunta, necesaria para cualquier proyecto en el país, creada por la Alianza Renalult-Nissan-Mitsubishi y Dongfeng.

Renault insiste en la vocación global de su vehículo. Piensa en la India, en Sudamérica y, por qué no, en África. No en Europa.