Si le hubiéramos dicho que se había descubierto un tratamiento con el fin de:
- Reducir su riesgo de mortalidad general en un 11%.
- Reducir el riesgo de desarrollar los principales tipos de cáncer.
- Aumentar la resistencia al ejercicio y la capacidad cardiovascular en más de un 10%.
- Reduzca su presión arterial, lo que le permitirá reducir su riesgo de accidente cerebrovascular mortal en un 10% y su riesgo de insuficiencia cardíaca mortal en un 7%.
- Bajar de peso eliminando el tejido graso.
- Niveles más bajos de azúcar en la sangre para aquellos con diabetes tipo 2.
- Mejorar el estado de ánimo y reducir el riesgo de padecer depresión.
- Reducir el riesgo de desarrollar enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson.
- Fortalecer los huesos y reducir el riesgo de osteoporosis.
- Mejorar la calidad de su sueño.
- Mejore su esperanza de vida saludable.
- Reduzca su estrés diario.
- Mejore su calidad de vida.
- Mejora tu creatividad en el trabajo.
¿No es un gran tratamiento? Mejor aún, ¿qué pasaría si estuviera disponible y fuera gratis para todos?
Este tratamiento casi milagroso es… ¡caminar! Durante siete u ocho millones de años, los humanos se han distinguido de los chimpancés -su último antepasado común- por, entre otras cosas, la capacidad de caminar sobre dos patas, de pie. Cada especie de homínido vio entonces como su esqueleto cambiaba gradualmente para hacer más fácil y más fácil el caminar.
A lo largo de nuestra evolución, los seres humanos han estado activos, ya sea cazando a sus presas o cultivando su tierra, construyendo su entorno vital o asegurando su supervivencia. Sin embargo, en las últimas décadas, el modo de vida del hombre actual ha cambiado, volviéndose cada vez más sedentario: demasiado tiempo en el coche, delante del televisor o del ordenador.
¿Desea mejorar su salud en general y prevenir varios problemas? Comenzar de nuevo a hacer lo que hemos sido parcialmente designados para hacer: ¡levantarnos y caminar!. La recomendación del portal médico Coonsulte es que los adultos deben realizar al menos 150 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada a alta por semana en sesiones de al menos 10 minutos. Así que estamos hablando de un poco más de 20 minutos al día. ¿De verdad te estás quedando sin tiempo?.