¿Qué es la eyaculación precoz?

[vc_row css_animation=»» row_type=»row» use_row_as_full_screen_section=»no» type=»grid» angled_section=»no» text_align=»left» background_image_as_pattern=»without_pattern» css=».vc_custom_1463134132862{padding-bottom: 75px !important;}»][vc_column offset=»vc_col-lg-offset-1 vc_col-lg-10 vc_col-md-offset-1 vc_col-md-10″][vc_column_text]La eyaculación precoz es la disfunción sexual más frecuente; casi todos los hombres en algún momento de sus vidas, entre la adolescencia y la vejez, padecen algún episodio de Eyaculación Precoz. En la práctica clínica encontramos que este trastorno se origina fruto de las masturbaciones rápidas, podríamos decir, casi compulsivas, tan frecuentes en jóvenes y adolescentes que aprovechan literalmente un minuto de reloj para así relajarse, descargar o dormir mejor.

También se dan en los adultos cuando las relaciones sexuales son escasas por cualquier motivo y la masturbación se emplea como desahogo perdiendo el carácter autoerótico que debiera tener. En estos casos, el mecanismo de la eyaculación se automatiza siguiendo el guión rápido de descarga al que se le ha ido acostumbrando y cuando se quiere controlar, por ejemplo en una relación compartida, no se puede y el mecanismo se dispara sorprendiendo al varón y a su pareja antes de haber concluido.

También son muchos los casos donde la excitación sexual que produce el contacto con el estímulo erótico, tantas veces imaginado, tan deseado, tan esperado, alcanza tal magnitud al hacerse realidad que inmediatamente conduce al clímax, a un orgasmo y una eyaculación tan inmediatos que no dejan tiempo para un disfrute más recreado, más tranquilo, más prolongado, ahora que se goza de la oportunidad.

La primera vez que esto sucede produce perplejidad. El hombre no lo entiende, le pilla desprevenido, precisamente ahora, cuando mejor tenía que funcionar. La pareja generalmente procura restarle importancia, pero sabe que para él la tiene: de repente le da un bajón, su autoestima se ve íntimamente afectada. Efectivamente por una vez no pasa nada. Pero con frecuencia el miedo a que vuelva a suceder alimenta ahora la anticipación de fracaso.

La preocupación puede hacer que las relaciones se hagan menos espontáneas, con tensión en la pareja, afectando a la comunicación o desencadenando reproches u otras alteraciones sexuales: disfunciones eréctiles, falta de deseo, apatía sexual, anorgasmia en la pareja… Las técnicas psicoterapéuticas modernas nos permiten tratar con máxima eficacia la eyaculación precoz y corregirla fácilmente y en muy poco tiempo.

Reeducar el mecanismo de control de la eyaculación requiere habitualmente cuatro sesiones, sin necesidad de alterar el patrón de funcionamiento sexual de la persona ni de la pareja, sino readaptándolo de forma natural a las preferencias individuales. Es un coste muy bajo en comparación al beneficio individual y en pareja que reporta. Os lo recomendamos.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row css_animation=»» row_type=»row» use_row_as_full_screen_section=»no» type=»grid» angled_section=»no» text_align=»left» background_image_as_pattern=»without_pattern» z_index=»»][vc_column][latest_post type=»dividers» number_of_colums=»2″ number_of_rows=»1″ order_by=»title» order=»ASC»][/vc_column][/vc_row][vc_row css_animation=»» row_type=»row» use_row_as_full_screen_section=»no» type=»full_width» angled_section=»no» text_align=»left» background_image_as_pattern=»without_pattern»][vc_column][blog_slider type=»carousel» auto_start=»true» info_position=»info_in_bottom_always» image_size=»landscape» blogs_shown=»6″ show_categories=»yes» show_date=»yes» show_comments=»no»][/vc_column][/vc_row]